El estudio del autismo siempre ha sido un tema de interés creciente para la Psicología Cognitiva. Los trastornos del espectro autista (TEA) son un trastorno neurobiológico del desarrollo que se manifiesta durante años en los primeros años de vida y perdurará durante el ciclo vital. El autismo tiene dos síntomas fundamentalmente: las deficiencias en la comunicación e interacción social y los patrones repetitivos a la vez que restrictivos de comportamiento, intereses o actividades.
Hasta hora el origen del autismo es desconocido, hay multitud de teorías que intentan explicarlo, algunas más apoyadas que otras. Las investigaciones científicas apuntan a varios genes, pudiendo coincidir o no con las personas afectadas.
¿ Malestar psicológico?
- ¿Ansiedad? ¿Tristeza? ¿Ira?
- ¿Preocupaciones? ¿Pensamientos negativos?
- ¿Necesitas ayuda para afrontar los problemas del día a día?
- ¿Dificultad para gestionar tus emociones?
- ¿Estado de ánimo bajo? ¿Sientes que no puedes disfrutar de la vida?
- ¿Problemas para dormir? ¿Te cuesta mantener la calma?
- ¿Te autocriticas demasiado?
- ¿Te cuesta conseguir tus objetivos?
¡Podemos ayudarte!
En el siguiente post hablaremos de las principales teorías sobre el autismo que intentan explicar su origen.
TEORÍAS PSICOLÓGICAS
- Teoría de la Mente
Relaciona el autismo con la teoría de la mente (ToM), esta fue formulada en 1985 por Simon Baron-Cohen. La teoría de la mente se refiere a la habilidad que tenemos los seres humanos para comprender y representar los estados mentales de otras personas. Esta capacidad aparece de forma innata durante la etapa infantil, se instaura durante los 4 – 5 años. Las personas con TEA tienen esta capacidad alterada (en diferentes grados de afectación), y hay que trabajarla para potenciarla. Estas personas necesitan romper en pequeños trocitos las conductas sociales para poder comprenderlas y aprender de manera gradual.
- Teoría de la Disfunción Ejecutiva
Fue formulada por Pennington y Ozonoff en 1996, esta teoría intenta explicar los patrones de comportamiento, intereses y actividades restringidos y estereotipados de las personas con TEA.
Las funciones ejecutivas (FFEE) son el conjunto de habilidades cognitivas que se utilizan para llevar a cabo actividades de manera autónoma. Estas capacidades innatas, nos permiten organizarnos, ser flexibles, planificar, anticipar, marcarnos objetivos, controlar impulsos, etc. Son un conjunto de procesos cognitivos que actúan en situaciones nuevas para las cuales no teníamos plan de actuación.
Existen varias funciones neuropsicológicas:
La capacidad para inhibir respuestas motrices y emocionales inmediatas a un estímulo o acontecimiento.
La memoria de trabajo. Usada para almacenar información como herramienta para resolver situaciones del futuro.
La autorregulación del estado de alerta, emocional y motivacional. Capacidad de las personas para cambiar nuestro comportamiento según el contexto.
Las funciones ejecutivas son necesarias para la resolución de problemas. Esta capacidad la tienen las personas para anticipar y prever los resultados a una acción, actividad, etc.
- Teoría del Debilitamiento de la Coherencia Central
En este caso fue propuesta por Uta Frith en 1989. Propone esta teoría para explicar la dificultad que sienten las personas con TEA para integrar toda la información de diferentes niveles en un todo coherente. Según esta, las personas con autismo encuentran dificultades para realizar comparaciones o juicios conceptuales. Implicando dos partes:
Perceptual. Las personas con TEA tienen preferencia para procesar la información local antes que la global. Fijándose antes en detalles concretos de imágenes que en su totalidad.
Conceptual. Las personas con TEA en muchas ocasiones no entienden situaciones y contextos ya vividos con anterioridad.
De forma que las personas con TEA son procesadoras locales de la información y las personas con un desarrollo normativo, procesadoras globales.
- Teoría neuropsicológica
Fue propuesta en 2005 por Fisher y Happé. Esta teoría se centra en la alteración de la función ejecutiva en las personas que sufren autismo. Planteando que los fallos propios del autismo se originan en el lóbulo frontal. Este se encarga de funciones como la memoria o los estímulos visuales y auditivos. También está involucrado en las emociones, el control de impulsos y comportamientos sociales. Además también implica las funciones ejecutivas, es decir los procesos que se encargan de controlar las acciones y el pensamiento.
- Teoría afectivo – social de Hobson
En 1995 Hobson propuso esta teoría, la cual plantea que los déficits cognitivos y sociales en el autismo son de naturaleza afectivo-social. Defendiendo la prioridad de las emociones en el desarrollo de las relaciones interpersonales, como déficit primario en las personas con autismo. Las personas con TEA manifiestan más dificultad para comprender las emociones, afectando también a las interacciones sociales. Hobson analizó las reacciones y lenguaje espontáneo de los autistas y encontró diferentes deficiencias en la capacidad de hablar, pensar o creer de estas personas.
- Teoría del cerebro masculino extremo
Baron – Cohen también defiende otras teorías. En este caso platea que un exceso de testosterona durante el embarazo origina un cerebro excesivamente masculino, aportando capacidad para sistematizar pero menos de empatizar.
- Teoría de la ceguera mental
Esta teoría formulada por Baron – Cohen está relacionada con la teoría de la mente. Las personas con autismo no pueden comprender que intenciones tiene otras personas y sufren ansiedad cuando observan ciertas conductas de otros. Esta teoría explica las dificultades sociales y de comunicación de las personas autistas.
TEORÍAS BIOLÓGICAS
- Teorías anatómicas
Los autores defensores de esta teoría sostienen que existen lesiones en el hemisferio derecho en los niños que se relacionan con las disfunciones del discurso y en el lenguaje no verbal. Esto aumenta la dificultad para estas personas por comprender determinadas actitudes de otras personas. El hemisferio derecho tiene determinadas implicaciones para entender la percepción, el aspecto emocional, el lenguaje no verbal o el reconocimiento de caras y emociones.
Estas son algunas de las teorías del autismo que destacan y que han tratado de aportar una explicación a las alteraciones psicológicas que suponen una disfunción para el desarrollo de las capacidades de la propia persona. Es vital un tratamiento médico y psicológico para tratar este trastorno.
Por último, esperamos que te haya sido útil esta entrada y recuerda que siempre puedes confiar en el equipo de En Equilibrio Mental.
Deja una respuesta